‘Cine de Samuráis. Bushido y Chambara en la Gran Pantalla‘ de Juan Manuel Corral es una realidad gracias a la editorial Lineas Paralelas. Algo más que un estudio cinematográfico sobre el género, pues esta obra amena bucea en los entresijos culturales y sociales que están relacionados con el guerrero feudal nipón y también en los movimientos políticos que utilizaron el Zen y el bushido como armas de alineación.
Las películas de samuráis concretaron su poderío de atracción en los años 50, influyendo en el Western. La llegada de la politizada década de los 60 supuso que el género tomara un cariz reivindicativo, a la par que el cine de Arte y Ensayo se ponía de moda. Ahora, Masaki Kobayashi y Masahiro Shinoda alejaban al samurái del contexto meramente familiar donde las cintas de la Toei protagonizadas por Misora Hibari se movían. Ahora, personajes como Miyamoto Musashi o Tange Sazen, y asimismo estandartes del Yakuza Eiga como el ciego Zatoichi, estarán acompañados de almas en pena que llevarán a la filosofía del bushido hasta su máxima expresión de sacrificio por el honor. La violencia, gore y sexo de los años 70 vino marcada por la llegada de ‘El lobo solitario y su cachorro’, que será homenajeado por ‘Kill Bill’ de Tarantino, o por el ‘Zatoichi’ de Takeshi Kitano en nuestra época. Estas última suponen con ‘El último samurái’ de Tom Cruise las cintas que han renovado el género, y que se ha popularizado entre unos jóvenes que adoran los últimos estrenos firmados por Takashi Miike.
Esta obra es más que un estudio cinematográfico sobre el género que popularizó en occidente Los 7 samuráis de Akira Kurosawa, que sufrió una repentina decadencia en los años 80, sólo mitigada por el éxito televisivo Shogun que protagonizó Richard Chamberlain, y que ahora ha vuelto con fuerza gracias al empuje de los aficionados al Manga con el estreno de cintas para jóvenes como Kenshin, el guerrero Samurái.
Uno de los aspectos más fascinantes e interesantes del cine japonés ha sido, sin duda alguna, el cine de samuráis, esos honorables y feroces guerreros que con o sin armaduras eran capaces de dar su propia vida por defender sus ideales. Ambientadas normalmente en el periodo Edo (1600-1868), las historias del cine de acción de samuráis se han conocido popularmente como «chambara» (チャンバラ), término que no es más que el resultado de unir “chanchan” (onomatopeya del sonido de dos espadas al chocar) y ‘barabara’ (la de la carne al ser despedazada). Aunque si bien hay que decir también que el chambara forma parte del género conocido como jidaigeki (drama de época japonés).
Aunque este género fue prohibido durante años (principalmente después de la capitulación japonesa y la ocupación americana), en Occidente descubrimos el éxito de estas películas a través de uno de los grandes, Akira Kurosawa, en el Festival de Venecia de 1951. Con ‘Rashômon’ no sólo descubrió al público internacional la calidad técnica de un director que acabaría siendo uno de los más importantes de la historia, sino que además puso en el mapa cinematográfico la figura de un personaje, el samurái, que hasta entonces formaba parte de un género autóctono muy privativo. Al igual que el Western es parte distintiva del cine de Hollywood, el Chambara lo es del cine japonés. De hecho, son muchas las cosas que comparten y las premisas que se han tomado prestadas o de las que beben. La politizada década de los 60 supuso que el género tomara un cariz reivindicativo, a la par que el cine de Arte y Ensayo se ponía de moda. Masaki Kobayashi y Masahiro Shinoda alejaban al samurái del contexto meramente familiar donde las cintas de la Toei protagonizadas por Misora Hibari se movían. Ahora, personajes como Miyamoto Musashi o Tange Sazen, y asimismo estandartes del Yakuza Eiga como el ciego Zatoichi, estarán acompañados de almas en pena que llevarán a la filosofía del bushido hasta su máxima expresión de sacrificio por el honor.
Es evidente que con el paso del tiempo, el cine de samuráis ha ido evolucionando y adaptándose a cada generación, a la par que ha tenido sus momentos de máximo esplendor y sus momentos de declive. Todo esto ha sido cuidadosamente tratado en este libro, desde su origen hasta la actualidad, pasando por grandes momentos como la conocida como Edad de Oro (con directores como Kurosawa, Inagaki, Kobayashi, Gosha, Okamoto o Shinoda, entre otros, y actores de la talla de Toshiro Mifune), el declive de los años 80 donde el género se mantuvo vivo a duras penas en su formato televisivo (recordamos por ejemplo) y el resurgimiento vivido gracias a títulos de reciente factura como puede ser la trilogía de Kenshin, el guerrero samurái.
Si bien desde el kabuki las historias han ido creciendo -incluyéndose multitud de mangas ambientados en la época-, la violencia, gore y sexo de los años 70 (con referentes como Kenji Misumi, Teruo Ishii o Kinji Fukasaku) no pudieron salvar al Chambara de su decadencia, incluso aunque hoy en día sagas como la de ‘El lobo solitario y su cachorro’ sean tan veneradas. En todo caso, el aficionado al manga que devoró estos cómics sobre samuráis en aquellos años, tiene en las generaciones actuales unos descendientes que han vuelto a popularizar el Chambara.
Juan Manuel Corral, buen amigo y me atrevo a decir que uno de los grandes conocedores del cine asiático de nuestro país, nos regala en este libro un fantástico repaso, detallado y contextualizado, del género, partiendo de los tiempos en los que el Kabuki proponía cientos de historias sobre samuráis e incluso en su representación en la televisión, aportando pequeños apuntes sobre la realidad del guerrero, el Zen, y la influencia del bushido en las artes marciales. Cursando pertinentes biografías sobre las familias teatrales más importantes para luego, continuar aligerando la oscuridad que imperaba en la época del cine mudo y de la preguerra, donde la mayor parte del legado se encuentra desaparecido; y finaliza la obra con las novedades más actuales, firmadas algunas por directores como Takashi Miike (’13 asesinos’ y ‘Hara-kiri: muerte de un samurái’), Yôji Yamada (‘El ocaso del samurái’, ‘La espada oculta’ y ‘Love and Honor’) o Hirokazu Koreeda (‘Hana’). Simplemente tenemos que echar un vistazo a la filmografía del libro para no perder referencias de los autores y sus películas.
‘Cine de Samuráis. Bushido y Chambara en la Gran Pantalla’ estudia todo esto desde un punto de vista muy ameno para el lector, sin dejar por ello de estar lleno de referencias y detalles que lo hacen más interesante e ilustrativo si cabe, mostrándonos la influencia que este cine ha tenido fuera de sus fronteras y como otras cinematografías han influido en los éxitos actuales. Por ello, si te gusta el cine de samuráis, éste es un libro que no puede faltar en tu biblioteca, tanto por la calidad de su contenido escrito como por la gran cantidad de imágenes que lo ilustran (119 nada más y nada menos, que se dice pronto), muchas de ellas de la colección personal del autor. Como siempre, esperamos conocer vuestras impresiones sobre la obra en los comentarios de esta entrada o en nuestras cuentas de Facebook o Twitter.
Lo mejor:
- Una fantástica estructura.
- Todo está contextualizado y detallado cuidadosamente -¡coged libreta porque será por datos!-.
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- Imágenes de archivo ideales para complementar el texto.
Lo peor:
- Si no te gusta este género, no te interesará mucho el libro. Pero si te animas a introducirte en sus historias, personajes y demás detalles, te fascinará.
La editorial Lineas Paralelas inició su andadura en Octubre de 2014 con este excelente trabajo de Juan Manuel Corral, descubierto multitud de detalles la mar de interesantes en esta fantástica obra compuesta por un total de 232 páginas, presentadas en blanco y negro. El formato elegido ha sido el formato rústico, de tamaño 17 x 24 cm y un grosor de aproximadamente 1,5 cm.
La cubierta está realizada en un material de unos 300 gramos -satinado- donde destaca por encima de todo por la impresionante ilustración realizada por Natalia Mirapeix Bedia. Los faldones de la sobrecubierta han sido destinados a incluir una pequeña biografía del autor y otros títulos de la editorial.
Por su parte, ‘Cine de Samuráis’ está dividida en los siguientes capítulos:
- Introducción
- Guerreros en la época feudal. Breve apunte histórico
. Origen de la casta
. Katanas, Zen y alma
. Los 47 leales samuráis y otras figuras célebres - El inicio de un género cinematográfico autóctono en las salas niponas
. Del kabuki al cine mudo. El Shinkoku-geki filmado
. Principales artistas en esta época
. El chambara y las guerras - La Edad de Oro del género
. Akira Kurosawa y Los 7 Samuráis
. Masaki Kobayashi, Hideo Gosha, Kihachi Okamoto y Masahiro Shinoda
. La vuelta de Miyamoto Musashi y Tange Sazen
. Samuráis en el cine de ninjas, yakuzas y de terror. Confusión entre géneros - El enardecimiento en las siguientes décadas. Gore y sexo
. Zatoichi y El Lobo Solitario y su Cachorro. Influencia del manga
. Los samuráis en el Pinku Eiga y Pinky Violence
. Kenji Misumi
. El género malvive en la televisión. El declive en los años 80 - El efecto Azumi y Kenshin. El resurgimiento gracias al público joven
. El último samurái con Tom Cruise. Influencia en el cine occidental
. El revival provocado por Takeshi Kitano, Kill Bill y The Princess Blade
. Takashi Miike revisando viejos clásicos. 13 Asesinos y Hara-kiri - Filmografía seleccionada
- Bibliografía e Internet
El precio de venta recomendado es de 17,00 €, pudiendo adquirirse a través de su web o en tiendas especializadas. De nuevo, no puedo más que recomendaros este gran trabajo, que nos ayuda a comprender y a conocer mucho mejor los entresijos, el contexto y la evolución que el género del Cine de Samuráis ha recorrido desde sus inicios hasta nuestros días. Un excelente trabajo que no puede faltar en la biblioteca de cualquier aficionado. Y para muestra, os dejamos el siguiente PDF para que podáis leer unos fragmentos:
Enlaces de interés: Lineas Paralelas