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«Quiero enviar un mensaje pero no sé qué decir. Está en tu corazón, envía lo que sea que estés pensando…«

Un año más hemos podido disfrutar de una fantástica programación de Fancine, el Festival de Cine Fantástico Universidad de Málaga. En esta 30 edición no nos ha sido posible estar allí en persona como en tantas otras ediciones por las medidas excepcionales de restricción de movimiento, pero si que hemos podido hacerlo de manera virtual gracias a una buena parte de la programación que nos han ofrecido a través de la plataforma Filmin. Un modo al menos accesible de acercarnos a este, como a otros festivales, para que podamos seguir viendo películas que de otra manera (legal) no tendríamos posibilidades de disfrutar. Ya os hablamos hace unos días de “Her Blue Sky” (空の青さを知る人よ / Sora no Aosa o Shiru Hito yo) dirigida por Tatsuyuki Nagai y hoy hacemos lo propio de otra de las películas que hemos visto: «Back to the 90’s» (2538 อัลเทอร์มาจีบ / 2538 alter ma jib) de Yanyong Kuruaungkoul. Tenía curiosidad por ver esta cinta porque normalmente siempre nos suelen llegar más producciones de Japón, Corea del Sur o China, por poner un ejemplo, pero de Tailandia no solemos poder ver tantos títulos como nos gustaría (más allá de casos puntuales licenciados o estrenados en plataformas).

La premisa de esta comedia ya me tenía convencido, y es que era una especie de homenaje a «Regreso al futuro» de Robert Zemeckis. Obviamente más allá de las referencias habituales y lógicas, me ha gustado mucho que el hilo conductor sea el humor. La película en sí pues se deja ver y como digo es entretenida si te gusta la temática y te metes en ella, y gracias a esos gags y momentos de comedia, mezclados con el drama y la ficción, dejan una divertida propuesta para la que era la temática donde se ubicaba dentro del festival: los viajes en el tiempo. Contamos entre su elenco con Dan Aaron Ramnarong, Pimchanok Leuwisetpaiboon (nominada a mejor actriz en su edición para los Thailand National Film Association Awards), Achita Pramoj Na Ayudhya y Vaan Chanintorn Jitpreeda, que la verdad bordan sus papeles, cada uno en su estilo y dentro de su posición, aunque también se rodean de un elenco de personajes secundarios dignos de mención, desde las telefonistas que toman nota de los mensajes que tienen que enviar o los abuelos maternos y paternos del protagonista. Hay momentos un tanto sobreactuados pero eh, es que es lo que le pega a la cinta y la verdad, no puedo poner pegas a eso.

«Los mensajes pueden ser engañosos pero los ojos… los ojos no pueden mentir«

Lo que más me ha gustado es ese choque cultural que ya hemos visto en otras películas -de imagen real o animación- donde las diferentes épocas se nos muestran a través del estilo de vida (ropa, tiendas, vehículos o incluso mencionando a algún que otro personaje de series recientes) y especialmente aquí a través de una tecnología que obviamente dependiendo de la edad que tengas has podido conocer y te hace meterte más de lleno en la trama. No deja de ser simpático el poder ver ese contraste entre tecnología que a pesar de tener no tantos años de diferencia, produce un desfase tal que al coincidir en la película consigue transmitir ese paso del tiempo. Por poner un ejemplo, si bien a día de hoy los móviles con conexión a internet están a la orden del día, hace unos años lo más era tener un busca -si, un aparatito al que podías mandar mensajes de texto y pitaba cuando recibía uno-. Nada de Whatssapp, Telegram o Line.

De redes sociales ni hablamos claro y quien dice un busca, dice ese choque que se produce también al comparar las tarifas ilimitadas en llamadas con las cabinas de teléfono y sus tarjetas de recarga; o la fotografía analógica y sus álbums de fotos frente a las fotos en digital, sin olvidarnos de aplicaciones como spotify donde podemos escuchar miles de horas de música frente a las clásicas cintas de cassette -y ya lo de rebobinar con un boli lo comentamos otro día que me estoy echando años encima jajaja-. En este sentido también tiene gran protagonismo en el argumento el tema musical, que como es lógico por aquí no soy capaz de identificar a los interpretes que aparecen o se mencionan durante el metraje. En definitiva, una propuesta simpática, entretenida sin mayores pretensiones que las de hacernos pasar un buen rato y que durante 111 minutos nos hará desconectar de la realidad para viajar esas cerca de dos horas a la Tailandia de hace algunos años. Como siempre, esperamos conocer vuestras impresiones en los comentarios de esta entrada o en nuestras cuentas de Facebook, Twitter o Instagram.

«¿Eso es todo? ¿Por qué no utilizas el teléfono o envías mensajes? Creo que el mensaje no puede explicarlo todo, prefiero decirlo a la cara…«

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✅Lo mejor: Entretenida propuesta con buena realización y fotografía, así como un elenco que la todo en pro de una cinta donde el humor y el romance está muy presente. Las referencias y su choque cultural.

❌Lo peor: Quizá algo menos de metraje (por duración) le habría venido bien. O en todo caso, que se animen con una secuela que siga la trama en la actualidad, quien sabe!

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