GoGo Monster (GoGoモンスター) de Taiyô Matsumoto

Reseñamos ‘GoGo Monster’ (GoGoモンスター) de Taiyô Matsumoto, una fantástica obra que explora los límites entre lo real y lo imaginario, especialmente difusos durante un período de nuestras vidas tan efímero como el eco de una armónica…

SINOPSIS MANGA

Solitario y poseedor de una desbordante imaginación, Yuki Tachibana está convencido de que su escuela encierra un misterio: el cuarto piso, de acceso prohibido para los alumnos, está habitado por criaturas invisibles. Y su líder, Big Star, se muestra inquieto ante la irrupción de espíritus poco amigables. Unos espíritus que están haciendo de las suyas en el centro, campando a sus anchas porque parece que nadie es capaz de hacerles frente.

Semejante teoría, sumada a su extraño comportamiento, convierten a Yuki en objeto de burlas e incomprensión. Es el rarito entre sus compañeros, al que hacen el vacío en muchas ocasiones. Pero Yuki sabe que no está solo, porque aunque sean pocos, cuenta con la complicidad y la compañía del señor Ganz (conserje del colegio), de IQ, estudiante de cursos superiores que siempre cubre su cabeza con una caja de cartón, y de un nuevo compañero de clase llamado Makoto Suzuki, quien pronto se convertirá en su mejor amigo…


«Todos me dicen que vaya con cuidado, que das miedo, ¿Cómo es que no te importa? Aquí tengo muchísimos amigos, aunque todos viven en el otro mundo y no se muestran…«


Taiyô Matsumoto es un autor al que conocimos hace ya algunos años en una obra coral titulada ‘Japón visto por 17 autores‘, donde ya se veía en su trabajo un estilo muy peculiar y particular que con el tiempo seguiría definiendo y mejorando. Tiempo después y gracias a la desaparecida EDT pudimos disfrutar de una de sus obras más conocidas como fue ‘Tekkon Kinkreet‘ (cuya adaptación anime fue dirigida por Michael Arias para el Studio 4ºC) o ‘Takemitsu Zamurái: El samurái que vendió su alma‘ y por citaros algún ejemplo más reciente, ECC Ediciones volvió a recuperar al autor y nos alegró a todos con la llegada de ‘Sunny‘ -obra que ha terminado de ser editada completa recientemente y cuya reseña podéis leer aquí si os apetece) y ‘Ping Pong‘ que se sigue editando actualmente. Sin lugar a dudas, hay momentos de esos llamados de «boom», donde autores más o menos conocidos suben de golpe en cuanto a interés y demanda… y como no, es una gran noticia que podamos seguir leyendo las historias de Matsumoto.

Pero no es solo un interés pasajero, sino que cualquiera que haya leído alguno de sus trabajos puede decir y reconocer el nivel del autor, tanto a nivel narrativo como a nivel visual. Sus historias son profundas, bien trabajadas, interesantes y de esas que dan que pensar. Y su dibujo es, cuanto menos, muy particular -en este aspecto, se encuentra tanto con seguidores como detractores-. En el caso que hoy nos ocupa, Taiyô Matsumoto vuelve a dejar patente su especial sensibilidad, combinando la tradición oriental con la influencia de la bande dessinée a través de un trazo inconfundible. ‘GoGo Monster’ se convirtió en la obra ganadora del premio especial de la Asociación Japonesa de mangakas en 2001 y fue nominada al premio al mejor dibujo en el Festival Internacional de Angoulême de 2006, explorando los límites entre lo real y lo imaginario, especialmente difusos durante un período de nuestras vidas tan efímero como el eco de una armónica…

Y es ese uno de los puntos destacables siempre en las obras relacionadas con la infancia por parte de Matsumoto. Es increible el modo que tiene de transmitirnos de un modo siempre impresionante de la psicología y la mente de los niños, brillantes en cuanto a la imaginación desbordante que va ligada a esas edades, donde como el protagonista de esta historia se mezcla realidad y ficción, pero una ficción que para ellos es muy real y muy cierta. Una imaginación que para ellos se va perdiendo con el paso de los años, al crecer. Matsumoto sabe como pocos retratar esta etapa de nuestras vidas, en las que pasamos de la infancia a la adolescencia o a la adultez, con la correspondiente perdida de inocencia que ello conlleva por muchos factores, tanto externos como internos, y el desconcentarte y desconocido futuro que espera tras ese importante y necesario cambio.


«Vuelve otro día y sigue siendo amigo de Yuki. Él no tiene amigos en este mundo…«


Evidentemente para plasmar todos estos elementos es necesario que el lector se sienta en muchos sentidos cercano al protagonista, por ello en muchos momentos sentiremos cierta sensación de desconcierto entre el guión y lo que vemos en las viñetas. No es nada raro e imagino que Matsumoto ha querido jugar muy bien las cartas en este asunto. Como hemos destacado, el protagonista es un chico muy peculiar, rarito podríamos decir en el contexto del resto de sus compañeros de clase. Esto no es más que el modo de plasmar esa duda, ese momento de inseguridad que sufre Tachibana al tener que enfrentarse a la realidad, a ese paso vital que está a punto de vivir, y para ello nada mejor que situarnos junto con dos de sus amigos: I.Q., posiblemente más peculiar que el propio protagonista, y Makoto, un chico normal que parece estar interesado en la imaginación de Tachibana y no lo mete en el saco como el resto para dejarlo de lado. Cada uno es feliz en su mundo y cuando es necesario se meten en el de los otros. Es esa dualidad entre realidad y ficción, entre mundo imaginario y mundo real, entre la imaginación de ser niño y la necesidad social de madurez de ser adulto, entre la sociedad que acoge y la sociedad que discrimina por no seguir el canón establecido para algunos estereotipos sociales.
Sin duda Matsumoto quiere hacernos participes de lo que ocurre en las cabezas de los personajes y lo consigue  con gran maestría a través de un ritmo sosegado pero lleno de carga, con una estructura establecida entre los pasajes y con un dibujo espectacular -dentro de ser un tanto diferente a lo habitual, tiene su encanto y se diferencia del resto-. Juega con los diálogos, en muchos casos sin recurrir a ellos, simplemente mostrándonos distintos planos y encuadres, objetos, detalles… todo esto hace que nos encontremos con unos contrastes impresionantes para dar una mayor ambientación al relato, entre luces y sombras, viñetas muy oscuras y otras muy claras, así como unos fondos espectaculares. No llega al nivel de Tekkon Kinkreet ni de Ping Pong, pero volvemos a encontrar unos diseños en muchos casos experimentales y de trazo marcado. Y aunque suene repetitivo, es de agradecer el poder disfrutar de obras de este estilo, que se salen del estándar comercial establecido y nos ofrecen y demuetran que hay una gran variedad artística y creativa en el mundo del manga. Es lo bueno y lo que me llevo de este manga, que he disfrutado de su lectura, de su ambientación, de la mezcla entre lo que es real y lo que no (o al menos, la interpretación que conlleva el intentar vislumbrar lo que ocurre en esas cabezas). Lo borroso, lo irreal, lo distinto consigue convertirse en algo más interesante que la propia realidad, que todo aquello que podemos demostrar con hechos.
Por ello no puedo más que recomendaros que leáis este tomo de ‘GoGo Monster’, para conocer un manga que merece la pena leer si te gusta el seinen con grandes dosis de terror psicológico y fantasía. Un manga diferente, surrealista, impresionantemente bonito en su conjunto historia + dibujo. Si buscas algo diferente, contado con buen gusto, buen ritmo y con el estilo y marca de la casa de Taiyô Matsumoto, tienes que darle una oportunidad. Dentro de lo imperfecto hay cierta perfección, y aquí se nos cuenta algo, aunque sea de un modo que pueda parecer inconexo o chocante en un primer momento. El resultado de la lectura no ha podido ser mejor, de verdad. Y por añadir un deseo, que ECC se anime ahora con Hana Otoko (花男) que solo son 3 tomos. Como siempre, esperamos conocer vuestras impresiones sobre la obra en los comentarios de esta entrada o en nuestras cuentas de Facebook o Twitter.

«Enseguida te acostumbrarás a las burlas y miradas de esa gente…«


Lo mejor:

  • El dibujo de Matsumoto, tan característico y especial como sus historias. Diferente a los demás, y en eso está lo interesante. Hay muchas clases de dibujo y Matsumoto tiene su toque.
  • La narrativa, especialmente el ritmo y la sensibilidad con la que nos transmite la historia. Impresionante reflejo de la mentalidad infantil ante el cambio de etapa, ante los miedos y las dudas que se nos presentan.
  • La edición de ECC está muy cuidada y tiene un tamaño ideal (A5) para poder disfrutar de las ilustraciones.

Lo peor:

  • Quizás haya a quien le choque ese surrealismo y la estructura de la narración. Sería un error no saber ubicarse en lo que se está leyendo.

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Comprar tomo

ECC Ediciones nos presentó en Diciembre de 2015 su edición de ‘GoGo Monster’ de Taiyô Matsumoto en un tomo único de grosor marcado, contando con un total de 472 páginas en blanco y negro -algo interesante por la historia que nos cuenta y porque la sobrecubierta está realizada a todo color en contraste con el contenido de la obra-. De hecho, muy destacable, con páginas cuyo fondo es de tonalidad gris frente a la mayoria blanca y otras en negro total. Para la traducción se ha contado con Olinda Cordukes Salleras (que ya nos trajo la traducción de ‘Sunny’ anteriormente) y la verdad es que una vez más está todo a la perfección, no he encontrado términos incorrectos o chocantes en ningún momento. El formato elegido vuelve a ser el formato rústico con sobrecubierta, de tamaño 21 x 15 cm y un grosor de aproximadamente 3,5 cm.

La cubierta está realizada en un material de unos 300 gramos -mate- que soporta bastante bien el cambio de páginas, mientras que la sobrecubierta está realizada en unos 200 gramos, con acabado mate. En ambos casos contamos con un juego entre ilustraciones a todo color, donde se nos presenta un buen número de esos «monstruos» que teóricamente habitan el otro mundo, así como una dualidad entre el protagonista y su mundo frente al protagonista en la realidad junto a Makoto. El faldón delantero está dedicado a la sinopsis, mientras que el trasero se dedica a una breve introducción-biografía de Taiyô Matsumoto. El sentido de lectura elegido es el oriental, de derecha a izquierda.

En total el tomo consta de 5 capítulos, aunque realmente podrían bien ser 6, puesto que las 7 primeras páginas -de numeración negativa- nos introducen en la historia: 1- Primavera, 2- Verano, 3- Otoño, 4-Invierno y 5- Primavera.

El precio de venta recomendado es de 27,00 € -aunque como siempre, en tiendas especializadas como Amazon, del que tenéis enlace en la portada de la izquierda- puede encontrarse con un 5% de descuento-.

 

Enlaces de interésECC Ediciones

17 comentarios el “GoGo Monster (GoGoモンスター) de Taiyô Matsumoto

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